20 de julio de 2015

Bestiario del Quijote (XLVII)


Cervantes y sus modelos, por Ángel Lizcano




   

 

La rémora 



Para señalar la causa de que un pescado tan pequeño pueda hacer un efecto tan grande como detener una nao en medio de su movimiento, no hallan los autores razón natural. Deste pececillo ¿qué razón se puede dar de sus fuerzas y de su poder? Este anda en las aguas como los otros peces y en ellas muestra su fortaleza, sin tener cuerpo para tanta violencia, con su boca se apega a la nao y no hay fuerza poderosa para la suya; porque ni el ímpetu de los vientos ni la fuerza de las olas, ni la solicitud de los remeros bastan para mover la nao donde una vez está asido sino apartándole della.
Fue este pescado entre los antiguos símbolo del impedimento y estorbo, por el efecto que hace de retardar las naos.

(del Tesoro de Covarrubias)



En su reciente biografía Cervantes, la Figura en el Tapiz, Jorge García López hace caer varios mitos sobre el autor del Quijote: la visión judaizante de Américo Castro, la erasmista de Bataillón, la noventayochista de Unamuno... Y también critica la perspectiva de Cervantes como "ingenio lego" que propugnó, entre otros, Menéndez Pelayo:

[Como el propio Cervantes] una verdarera pléyade de escritores de la época [Lope de Vega entre ellos] no cursa el equivalente de los actuales estudios universitarios. Ni falta que les hacía, porque innumerables son los caminos para obtener una buena formación literaria y sobre todo para acceder a la verdadera creatividad estética. Y ya sabemos que, antes y ahora, el conservadurismo cultural y la enemiga contra cualquier innovación se atrincheran casi siempre en las instituciones oficiales, y significadamente en la universidad.

Curiosas líneas donde, paradójicamente (o no tanto), un Catedrático de Literatura de la Universitat de Girona hurga en la herida de la rémora universitaria.

(Gromov) 


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.