30 de junio de 2025

En línea

 

                           https://youtu.be/


29 de junio de 2025

Días de Rastro

 


Burgos, 2003

15 euros 

el trapero 


Escuelas Unitarias


 Foto / JMarchamalo


ULE




 

Callejero


 Tapia de Rioseco


Hojeo


 Larsen

Luces de bohemia

 

                             https://www.rtve.es/



27 de junio de 2025

Rue de l’Odéon



 La prima de Sylvia Beach

El amanuense


El placer de los extraños

 


El cejuelo arrancado ante la dura mirada del púgil y el sello inhóspito nos indican que la Trilogía de la culpa ha sido sustraída de la Biblioteca Pública. Cada vez tengo más libros robados.
Larsen


Recortes


 Morti


Canción dominical



 Poem a / Martín López-Vega


Obituario


IUriarte


 

26 de junio de 2025

Enemigos de los libros / 11



Enemigos de los libros: El lector censor.



 

Sylvia Beach

 


En 1919 una joven norteamericana llamada Sylvia Beach abrió una librería inglesa en la pequeña calle Dupuytren de París, que pronto se trasladaría a la dirección que se convertiría en mítica: el número 12 de la calle de l’Odéon. La librería, a la que bautizó con el nombre de Shakespeare and Company, fue, entre otras muchas cosas, el punto de encuentro de los más grandes escritores y artistas de la época. Por aquel espacio mágico de intercambio cultural pasaron escritores franceses como Paul Valéry, André Gide, Valéry Larbaud o León-Paul Fargue, y anglosajones como Ernest Hemingway, Francis Scott Fitzgerald, Gertrude Stein, Sherwood Anderson, Ezra Pound, Djuna Barnes, Ford Madox Ford, T S. Eliot, Thornton Wilder, D. H. Lawrence y el gran James Joyce. Fue Sylvia Beach, desdoblada en editora, quien con coraje y osadía, cuando ningún editor se atrevía a asumir el reto, publicó su Ulises. Estas memorias de una irrepetible librera y editora son la crónica de un período igualmente irrepetible, definido por una inusual concentración de genios literarios, a los cuales aglutinó Sylvia Beach en su maravillosa librería parisina.



Las malas lenguas

 


Este que se ha ido es mejor juez que persona.


Oído a un exlibrero en Aida Books & More