Aquí tienes unas fotos que hice de esta pequeña y laberíntica librería de Stratford-upon-Avon, muy cerca de donde Shakespeare estudió gramática, entre cuyos estantes me perdí durante un tiempo indeterminado, por si quieres colgarlas. Alguna viene con fantasma incluído. A ver si adivinas en cuál está el perro ultramarino de la dueña, una viejecita muy simpática que ya pertenece a las imágines de mis recuerdos.
[Morti]
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