Donbass (2018), de Sergei Loznitsa, es una retrato en crudo de un conflicto quizá olvidado. Estamos en una Ucrania donde nada tiene sentido salvo el horror. Y así, entre la tragedia y la más desolada de las farsas discurre una película incómoda, caótica y brutal. Parafraseando a Coppola, no se cuenta la guerra, es ella misma la guerra. Soberbia. Luis Martínez (Diario el Mundo)
[Travis Bickle]
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